Educar a los padres (Nativel Preciado en Tiempo, 8 abril)

Los expertos aseguran que el entorno familiar es más poderoso y afecta más a la inteligencia que la influencia genética. Para sacar el máximo provecho se necesita una educación intensiva desde la primera infancia. Las encuestas de Javier Elzo indican que más del 40% de los padres españoles reconocen que no saben cómo educar a sus hijos. Los padres viven asustados frente al fracaso escolar, el déficit de atención, la depresión, la violencia, el consumo de drogas o el embarazo de una hija adolescente. Cuando no saben qué hacer se sienten culpables. Buscan alguien fiable que, en primer lugar, les tranquilice y les dé confianza y, después, les muestre alguna salida. Las personas son lo que son, más lo que podrían ser gracias a la educación de toda la tribu. Esta frase me la ha prestado José Antonio Marina, escritor, filósofo y pedagogo que ha creado la Universidad de Padres On-line (www.universidaddepadres.es) con la eficacia que caracteriza todos sus proyectos. Su idea pedagógica ha tenido una excelente acogida porque da respuestas a los problemas que los padres no son capaces de resolver durante todo el proceso educativo. Lo que ha hecho Marina es llevarles la escuela a casa a través de Internet. Hasta ahora es totalmente gratuito inscribirse en la web, cada curso dura diez meses y dispone de un tutor al que consultar en cualquier momento. También pueden intercambiar opiniones con otros padres que tengan experiencias similares. El proyecto carece de cualquier connotación política o religiosa. Para garantizar su independencia se financia con los derechos de autor de los libros que escribe Marina sobre educación. De las 3.000 solicitudes iniciales sólo se han inscrito 500 padres de niños hasta 6 años, porque el equipo de tutores era reducido, pero a partir de mayo se abrirá un nuevo plazo de matrículas y se irán aumentando progresivamente los medios y la edad de los niños hasta llegar a los 16 años. La única obligación de los que participan en el curso es realizar las actividades a las que se comprometen con el tutor. Sólo en caso de incumplir su compromiso se les da de baja. El perfil de la mayoría de los solicitantes es el de parejas profesionales, de clase media, con nivel educativo medio-alto y, como era previsible, en los foros participan más las madres que los padres. Están preparando el sistema informático para lanzar una revista digital con el fin de que los cursos puedan gestionarse desde otros centros educativos, para llegar a los 40.000 alumnos en un par de años. Más allá de la espectacularidad de las cifras, el programa proporciona conocimientos, pero también da instrucciones para aprender recursos intelectuales, éticos y emocionales. El proyecto educativo consiste en aumentar la capacidad de acción y prevenir situaciones de riesgo. Lo importante es que los padres ayuden a sus hijos a ser buenas personas, tomar las decisiones adecuadas, aguantar el esfuerzo, establecer vínculos sociales y saber enfrentarse a futuros conflictos.